Continuamente oímos referirse a las MiPymes o Pymes como la “solución a todos los problemas” del sector privado cubano. Es cierto que reconocer el carácter de empresas a los negocios privados cubanos les imprimirá cierto halo de “seriedad” y reconocimiento a un sector en crecimiento que tiene, como uno de sus principales temores, la “temporalidad” de ser “experimentos” y su falta de respaldo en una Ley que requiera de la Asamblea Nacional para su modificación y no estar a expensas de Decretos, Resoluciones y hasta cartas directivas que hoy «autorizan» algo y mañana «limitan».
Sin embargo, es importante entender que Pymes no es más que una de las clasificaciones de una Empresa, en éste caso teniendo como base el tamaño, y quizás no la clasificación más importante.
Las presentes Notas son una introducción a un tema que cada día va tomando más importancia en el país.
Ley de Empresas en Cuba, apuntes para iniciar un Debate
El reconocimiento en la Constitución de la Republica de 2019 de la propiedad privada en Cuba sobre los medios de producción y el anuncio de que en el 2022 se aprobará la Ley de Empresas ha motivado a muchos al ver que pueden ver cumplidos sus sueños de realizar sus emprendimientos personales, aunque muchas dudas nos quedan, entonces:
¿Qué dice el marco jurídico que tenemos hoy?
¿Cuál es la voluntad política que muestran los documentos públicos del Partido Comunista de Cuba?
Por otra parte,
¿Estamos preparados para convertir en Empresas nuestros emprendimientos?
¿Sabemos qué es una Pymes?
Sobre lo que está escrito hoy en relación a las Empresas, Propiedad Privada, Pymes y otros temas afines hablamos en estos Apuntes, invitándolo a iniciar el estudio a un tema, que, aunque se aprobará en julio del 2022, poco a poco se va acercando cada día más.